El empleo de elementos metálicos en el circuito de agua tras cualquiera de los sistemas de tratamiento supone un alto riesgo de corrosión de los mismos, con el consiguiente paso al dializado, debido a la alta agresividad del agua tratada por lo que todas las tuberías y conexiones debería ser de PVC o materiales similares. La intoxicación aguda de níquel se causa por el uso de placas de acero níquelado usadas como calentadores de agua tras la ósmosis inversa.